Arpillera que representa a Marta Ugarte, activa militante del Partido Comunista, asesinada por las fuerzas militares en 1976. Su cuerpo apareció en la playa La Ballena (Los Molles), con huellas de haber sido torturada mediante el uso de alambre.
Las mujeres no estuvieron exentas de violencia y muerte durante la Dictadura. De las que fueron apresadas, muchas sufrieron torturas físicas, psicológicas y/o sexuales.
Programa de debate político realizado por Proceso para su difusión en sindicatos, escuelas y universidades y organizaciones sociales en general. En esta edición, se realiza un foro con la participación de Graciela Bórquez, DC; María Antonieta Saa, feminista; Silvia Lamadrid, Movimiento por la Emancipación de la Mujer Chilena (MEMCH); Cotty Silva, movimiento de mujeres pobladoras; Graciela Alemparte, Partido Nacional. Testimonio de violencia contra la mujer, de mujeres de la Casa Sofía de Pudahuel; de la siquiatra Rosa Aguirra, acerca del aborto; de Irene Antillanca y Yolanda Cayuqueo, dirigentas de la Asociación Nacional de Empleadas de Casa Particular (Anecap). Dirección de Hermann Mondaca.
Arpillera que representa a una figura femenina que es levantada del suelo por la acción del fuego o humo. Esta obra posiblemente alude a María Castillo Muñoz, militante del MIR, quien el 19 de mayo de 1984 murió explosionada a los pies de una torre de alta tensión en Pudahuel, supuestamente, a causa de unos explosivos que trataba de activar (según la CNI). No obstante, testigos indican que fue apresada junto a otro compañero, y luego asesinados por la CNI en diferentes lugares.
Documental que detalla los métodos y mecanismos de tortura aplicados en las mujeres por lor organismos del Estado baja la dictadura militar. Incluye testimonios de mujeres torturadas y familiares de víctimas. La película pertenece a la serie de investigación "Efectos de la tortura en Chile" de la Comisión Nacional contra la Tortura.
El 2 de julio de 1986 el fotógrafo Rodrigo Rojas De Negri y la estudiante Carmen Gloria Quintana fueron brutalmente quemados. Mientras preparaban una barricada en Estación Central junto con otros manifestantes, llegó una patrulla militar, que se encargó de golpear a los dos jóvenes, para luego rociarlos con gasolina y encenderles fuego. De este atroz crimen sólo Carmen Quintana pudo sobrevivir.