Serigrafías que son parte del trabajo artístico de Guillermo Nuñez, quien fue encarcelado por primera vez en los subterráneos de la Academia de Guerra de la Fuerza Aérea de Chile, donde debió permanecer con los ojos vendados día y noche, desde el 3 de mayo de 1974 hasta el 9 de octubre de ese mismo año, fecha en que fue dejado en libertad condicional, con la obligación de concurrir a firmar una vez por semana el libro de reos excarcelados de la Fiscalía de Aviación. Durante este período de libertad tutelada, el artista fue transformado la experiencia vivida en sus días de reclusión en dibujos, pinturas, grabados, poemas y textos literarios. Parte de este trabajo fue censurado y declarado peligroso para la seguridad nacional, siendo nuevamente detenido y expulsado de nuestro país el 30 de julio de 1975. El artista solo pudo retornar al país luego de 12 años de exilio.